EFE
París
París
El presidente de Google, Eric Schmidt, anunció ayer la próxima apertura en París de un Instituto Europeo de la Cultura, así como la creación en Francia de un centro de investigación y desarrollo, y la intención de invertir en las universidades del país.
Google piensa financiar, asimismo, programas de investigación en ingeniería, en ciencias políticas, derecho y periodismo relacionados con las cuestiones que plantea internet a la sociedad, según subrayó un comunicado del Elíseo, donde Schmidt se reunió ayer con el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Además de presentar sus múltiples proyectos al jefe del Estado francés, Schmidt informó de ellos a la prensa y a los estudiantes de la Escuela de Ciencias Políticas.
"Es algo más que una operación de negocios", les explicó el presidente de Google, quien calificó el conjunto de proyectos en Francia de "momento histórico" para su grupo.
Precisó que el Instituto Europeo de Cultura, destinado a acelerar la digitalización de libros, revistas y documentos, supondrá una inversión inicial de varios millones de dólares, destinada a aumentar considerablemente en su segundo año de existencia.
Esta institución única en el mundo será guiada por un comité científico, integrado por personalidades y expertos de alto nivel, y centralizará todos los proyectos de Google relacionados con el mundo de la cultura en Europa, añadió.
Respecto al futuro Centro de Investigación y Desarrollo, dijo que comenzará a funcionar a lo largo de 2011, "atraerá a los mejores ingenieros mundiales" y podría emplear desde su primer año de funcionamiento hasta medio centenar de expertos nacionales.
El presidente de Google propuso además lanzar un programa de ayuda a las nuevas empresas francesas, a las que propondrá formación e instrumentos tecnológicos, así como a las pequeñas y medianas empresas interesadas en impulsar el comercio electrónico.
Schmidt dijo haber elegido Francia para todos estos proyectos porque su mercado publicitario "es uno de los más sofisticados", porque este país adoptó muy rápidamente internet y porque a los franceses "les gusta Google cada vez más".
Sarkozy celebró "el importante plan de inversión" que Google se dispone a hacer en Francia, así como las modalidades "del nuevo diálogo que propone a los actores franceses de la cultura".
Según el Elíseo, el gigante estadounidense se interesó por Francia gracias, entre otros criterios, a su marco jurídico y fiscal.
Google piensa financiar, asimismo, programas de investigación en ingeniería, en ciencias políticas, derecho y periodismo relacionados con las cuestiones que plantea internet a la sociedad, según subrayó un comunicado del Elíseo, donde Schmidt se reunió ayer con el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Además de presentar sus múltiples proyectos al jefe del Estado francés, Schmidt informó de ellos a la prensa y a los estudiantes de la Escuela de Ciencias Políticas.
"Es algo más que una operación de negocios", les explicó el presidente de Google, quien calificó el conjunto de proyectos en Francia de "momento histórico" para su grupo.
Precisó que el Instituto Europeo de Cultura, destinado a acelerar la digitalización de libros, revistas y documentos, supondrá una inversión inicial de varios millones de dólares, destinada a aumentar considerablemente en su segundo año de existencia.
Esta institución única en el mundo será guiada por un comité científico, integrado por personalidades y expertos de alto nivel, y centralizará todos los proyectos de Google relacionados con el mundo de la cultura en Europa, añadió.
Respecto al futuro Centro de Investigación y Desarrollo, dijo que comenzará a funcionar a lo largo de 2011, "atraerá a los mejores ingenieros mundiales" y podría emplear desde su primer año de funcionamiento hasta medio centenar de expertos nacionales.
El presidente de Google propuso además lanzar un programa de ayuda a las nuevas empresas francesas, a las que propondrá formación e instrumentos tecnológicos, así como a las pequeñas y medianas empresas interesadas en impulsar el comercio electrónico.
Schmidt dijo haber elegido Francia para todos estos proyectos porque su mercado publicitario "es uno de los más sofisticados", porque este país adoptó muy rápidamente internet y porque a los franceses "les gusta Google cada vez más".
Sarkozy celebró "el importante plan de inversión" que Google se dispone a hacer en Francia, así como las modalidades "del nuevo diálogo que propone a los actores franceses de la cultura".
Según el Elíseo, el gigante estadounidense se interesó por Francia gracias, entre otros criterios, a su marco jurídico y fiscal.
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